viernes, 24 de julio de 2009

Voy...

"Voy donde la luz me guía ..
Voy donde mi cuerpo confía..."
(Menta Saez)

martes, 21 de julio de 2009

Flor...

Creo que no hay sentimiento mas poderoso que el que nos trae un hijo.
Ese nidito calentito que a la vez nos cobija y nos aterra.
Y esto es también devenir en mujer. Como dice Laura Gutman: "La madre que nos habita" que somos nosotras y son todas las mujeres de nuestro linaje en parte, y esos lugares quedan en carne viva apenas parido el bebé.
Nunca voy a olvidar esa sensación de aturdimiento, de belleza , de miedo, de impotencia, de enojo, de amor. Algo que realmente te atraviesa, no hay chance, hay que transitar.
Juntas paso a paso, vos y tu hijita, dos úteros temblando en la misma sintonía...es bello y es abrumador.
Y todas las mujeres de la familia de tu compañero que se hacen presentes en ella también...es muy fuerte, y es muy fuerte en estos momentos de tanta vulnerabilidad tener que compartir el cachorro, y compartir este tránsito tan intimo con el hombre que elegimos, y más fuerte aún tratar entre lágrimas de explicar.
Tantas veces vas a escuchar: "Pero por qué llorás?, mirá la bebé hermosa y sanita que tenés..."
Lloro por que parí, y se me abrieron todos los cuerpos, el físico, el energético, el espiritual...y de ahí salió el bebé y salí yo también!
Lloro por que siento que tengo que llorar para sanarme y para liberar a mi hija.
Lloro por que no puedo dormir, ni comer, sin acordarme que ahora soy distinta.
Loro por que no se que me pasa que tengo que llorar!!
Te abrazo y te acompaño.
Todas somos una.